Luz, color y música en vivo al alcance de todos sin salir de Benidorm

 

David Climent se ha convertido en Director delBenidorm Circus’ tras coger el relevo de su padre, Vicente Climent, pionero en la idea de dar al mundo del circo otra perspectiva y de hacerlo atractivo para todos los públicos. El joven también es el presentador del espectáculo, que cada domingo sorprende y hace que mucha gente repita y vuelva para disfrutar de una puesta en escena cuanto menos innovadora.

El proyecto, íntimamente ligado a la sala de fiestas Benidorm Palace, ya es una realidad que poco a poco va mejorando y que tiene intenciones de expandirse fuera de la Comunidad Valenciana. Por 16 € los adultos y 8 € los niños, pequeños y mayores pueden disfrutar de una tarde de diversión asegurada.

 

¿Cómo surge la idea de poner en marcha un circo permanente en Benidorm?

Todo se empieza a gestar hace unos tres años, cuando mi padre, Vicente Climent y Toni Tonito, un payaso reconocido a nivel internacional, empiezan a barajar la posibilidad de crear un espectáculo, ligado al Benidorm Palace, y que sirva de trampolín.

¿Cómo aterriza usted en el Benidorm Circus?

Empecé desempeñando un rol secundario, principalmente ayudando en la dirección y la preparación del espectáculo. Desde un principio soy el presentador, en lo que ha influido de manera notable el ser bilingüe. Poco a poco he ido adquiriendo más responsabilidades hasta el día de hoy, en el que también hago un número de mini trampolín y me encargo del espectáculo, de los ensayos y de la publicidad. Ha habido una entrega de llaves por parte de mi padre, lo que implica que soy el que cierra el circo.

¿Cuánta gente compone el espectáculo?davidcliment

 

En este momento somos más de 50 personas entre músicos, bailarines, malabaristas… En el circo hay representación de siete nacionalidades diferentes: española, francesa, inglesa, italiana, rusa, ucraniana y polaca.

¿Cómo definiría la puesta en escena y lo que la gente puede ver si visita Benidorm Circus?

 

Es difícil de definirlo en pocas palabras. Le hemos dado una vuelta a la idea tradicional que todo el mundo tiene de este sector. Lo que más llama la atención es que no tenemos animales, acercándonos a la idea de espectáculo del Circo del Sol, aunque conociendo nuestras limitaciones. A día de hoy los circos itinerantes tienen muy mala imagen entre el público, mientras que nosotros presentamos un proyecto permanente en una carpa climatizada, con grandes dosis de luz y sonido y con una orquesta en directo, que sólo poseen 3 circos en toda España. Esto supone que nos definamos como un circo de moqueta roja, que en el mundillo implica un plus de elegancia.

¿De qué manera se consigue que un circo tenga la característica de permanente?

 

Hay que pedir permisos al Ayuntamiento, que manda a un técnico y da el visto bueno a las instalaciones. Hemos tenido mucha suerte en este aspecto, ya que estamos situados dentro del recinto del Benidorm Palace, lo que supone que el proyecto va ligado al de la sala de fiestas. El mejor ejemplo de este hermanamiento es que muchos de los artistas y de los músicos que actúan en el circo también lo hacen en el Palace.

 

¿Cuál es su modelo de gestión, ahora que está al frente del circo?

 

Mi principal objetivo es modernizar la idea del espectáculo y hacerlo más dinámico. La intención es proyectarlo en Benidorm y en la comarca recalcando la idea de que no hay otro espectáculo parecido en la zona. Desde hace cuatro meses pertenecemos a la Asociación de Circos de Autor, institución que busca diferenciar los circos de nueva creación de los demás, dando un salto de calidad buscando nuevos modelos de inversión.

 

¿Qué cualidades ha de tener cualquier persona que trabaje en este mundo?

Alegría y compañerismo. Hay que tener siempre presente la improvisación, ya que un espectáculo de estas características requiere de ella en ciertos momentos. La ilusión y la  solidaridad también son importantes, máxime cuando trabajas con muchas personas y tienes que sacar las funciones adelante. Somos como una gran familia y como tal hemos de colaborar unos con otros para que el trabajo salga bien.

 

¿Qué tiene este circo que no tengan otros?

 

El espectáculo en sí. Se trata de una mezcla entre algo innovador y lo tradicional. Como ya he dicho anteriormente buscamos acercarnos a la esencia del Circo del Sol, alternando con los payasos, muy importantes para nosotros. La palabra que mejor define nuestro proyecto es diversión, todas las críticas giran en torno a la sorpresa que causamos en el público, no se esperan lo que ven.

¿Qué mensaje lanzaría a todos aquellos que piensan que el circo es sólo para niños?

Tenemos la inmensa suerte de estar en Benidorm, ciudad turística por excelencia, lo que nos permite que haya gente durante todo el año. Yo destacaría, por encima de todo, la calidad de los artistas y su profesionalidad.

Además contamos con la presencia en el espectáculo de Toni Tonito, premio nacional de circo en el año 2005 y que tiene un papel relevante en el espectáculo. También participan ex atletas olímpicos, expertos en gimnasia deportiva y trampolín, y un director artístico muy reconocido, David Moore, que ha recorrido las principales salas de fiesta del mundo.

En definitiva, animo a la gente a que nos visite porque van a ver algo nuevo y que les va a dejar con la boca abierta, ya que la mezcla de todos estos ingredientes da como resultado un producto de alta calidad que no deja indiferente a nadie.

¿Qué proyectos de futuro tienen a medio y largo plazo?

Queremos abrir una escuela de circo para formar profesionales del sector. También tenemos en mente poner en marcha otra escuela de artes escénicas. Otro proyecto que barajamos es el de celebrar un Festival de Circo como los que ya se celebran en otras ciudades como Albacete o Palamós.

Si el espectáculo funciona como hasta ahora, nuestra pretensión de cara a los próximos años, es exportar la idea del espectáculo por España, traspasar la frontera de la Comunidad Valenciana para mostrar al gran público lo que aquí hacemos.

 

 

Leticia Murillo.

Artículos Archivados

Reportajes